8/15/2022

Desarrollo Emocional en Niños: ¿Qué Es y Cómo Guiarlos?

En los dos primeros años de vida, el Desarrollo Emocional o Afectivo y la confianza en los demás está muy presente en el crecimiento de los niños. En esta etapa, los niños aprenden la existencia de las emociones y cómo manejarlas alrededor de sus intereses. Es fundamental que nosotros como padres estemos involucrados en el desarrollo emocional y afectivo de nuestros niños. Continúe leyendo para aprender qué es, por qué es importante, y cómo podemos ayudarles en su desarrollo emocional y afectivo.

Lorena Vidaurre, Ph.D.
Lorena Vidaurre, Ph.D.
Desarrollo Emocional en Niños: ¿Qué Es y Cómo Guiarlos?

¿Qué es el desarrollo emocional en niños?

El desarrollo emocional en niños es el proceso en el cual los niños aprenden a construir su identidad, su autoestima, su seguridad, la confianza en sí mismos y en quienes rodean su espacio. Dentro de este espacio están sus familiares, amigos y educadores. A este tipo de desarrollo también se lo conoce como el desarrollo afectivo en la primera infancia, o la expresión de emociones. 

Como padres o guardianes de nuestros niños, una de las mejores maneras de involucrarnos, es estando atentos a cada una de sus emociones y cambios de humor, con el fin de guiarlos en su desarrollo emocional. 

A medida que los niños crecen, van reconociendo y demostrando que existen emociones. Estas emociones cambian y aparecen de manera progresiva cuando ellos empiezan a reconocer que tienen poder sobre sus emociones; esto pasa naturalmente y es parte del proceso de su desarrollo emocional. 

Es importante reconocer y respetar los sentimientos de nuestros niños para que ellos sientan que están en un espacio seguro, que nosotros somos su refugio y su pilar; y que estamos para ayudarles en sus momentos difíciles. De la misma manera, al conocer y respetar sus sentimientos tenemos la oportunidad de presenciar sus experiencias más felices y aprender a celebrar pequeños momentos y glorias. 

Los niños aprenden observando

Los niños aprenden de lo que ven a su alrededor. Aprenden fijándose en lo que hacemos o decimos frente a ellos y en base a la interacción con otros niños. En este período, nuestros niños aprenden que son una persona única y distinta de los demás. 

¿Ha escuchado la frase que dice “Disfrute a sus hijos, el tiempo pasa muy rápido”? Si la respuesta es sí, no está solo. Muchos padres, educadores y doctores nos aconsejan que abracemos fuerte a nuestros niños porque después ellos crecerán y nuestros besos y abrazos ya no serán una prioridad para ellos. En cierto modo esto es verdad, ya que la naturaleza de su desarrollo emocional pone diferentes intereses frente a ellos dependiendo de la edad. 

El Desarrollo Emocional en la infancia se divide en tres etapas en las cuales se presentan el desarrollo físico, cognitivo y social en distintas medidas. Estas tres etapas se caracterizan por edades. 

Las etapas del Desarrollo Emocional según la edad

1.) Los dos primeros años

Durante los primeros meses de edad (0-24 Meses), el bebé aprende a jugar e interactuar con las personas cerca de él, con las que él ya tiene una cercanía habitual. A temprana edad el bebé empieza a reconocer las caras familiares y a identificar a quién conoce y a quién no. También se guían por el olor y el tono de voz de las personas a quienes tienen cerca.

2.) Entre los dos a tres años

La siguiente etapa de su desarrollo es desde los 2 a 3 años de edad, cuando los niños empiezan a hablar y a darse cuenta de que su cuerpo puede controlar ciertos movimientos y emociones. Esto puede darse antes o después, dependiendo del desarrollo de cada niño. 

En esta etapa empiezan a presentarse cambios en su humor. Estos cambios pueden ser muy rápidos, y posiblemente vienen acompañados de una actitud impaciente y demandante, ya que los niños querrán que las cosas se hagan a su manera. 

Es muy común que dentro de esta etapa los niños demuestran extremo apego a sus padres y tienen miedo de separarse de ellos. 

3.) Entre los tres a los cinco años

En la tercera etapa, el desarrollo del niño desde los 3 a 5 años de edad, se basa principalmente en el juego. Después, empieza su etapa educativa y aprenden a socializar con otros niños y a tener actividades compartidas.

En esta etapa también aprenden otro tipo de emociones, como es la competencia con los demás o, a sentirse felices cuando logran lo que se han propuesto o lo que les han pedido. Por ejemplo: Quitarse la ropa para entrar a la ducha solos o poner los juguetes en su lugar. 

Otra emoción muy fuerte que sienten es la frustración y habitualmente se da como resultado de un fracaso. Por ejemplo: No haber terminado la comida o no haber podido armar una torre de legos. 

Dentro de todo este proceso y desarrollo, es natural sentir miedo e inseguridad. Pero con una guía correcta y con el apoyo de sus padres y educadores, los niños pueden aprender a manejar sus emociones y seguir su desarrollo de manera favorable. 

Consejos para guiarlos en su Desarrollo Emocional

Los niños sienten un infinito apego por sus padres desde que llegan a este mundo. Por esta razón, somos nosotros quienes podemos demostrarles amor y tranquilidad. Un ambiente agradable y positivo en casa es vital para el desarrollo saludable de los niños. Nuestra labor se centra en educar con valores ya que ellos aprendan del ejemplo.

Algunas herramientas en las que podemos apoyarnos son las siguientes:

  • Aceptar la identidad de nuestros niños sin excepciones, y hacerles sentir seguros de su identidad. Ayudarles a reconocer sus emociones, identificándolas y expresando cómo se sienten en diferentes situaciones. 
  • Apoyarles en su autoestima y demostrarles que están seguros a nuestro lado. Esto se logra con elogios específicos en base a su desempeño. Es primordial que ellos sepan el orgullo que sienten sus padres por ellos.
  • Jugar con ellos y realizar actividades de responsabilidad para aprender algo nuevo juntos. Dedicarles tiempo de calidad es un regalo muy preciado que hoy en día muchos de nosotros lo hemos dejado de lado, sin entender que somos bendecidos al tener nuestra familia cerca. 

Por ejemplo: Usted puede dedicar un día especial durante la semana para realizar actividades juntos; Como cocinar una receta familiar, leerla, tener todos sus ingredientes en orden y ponerla en práctica. También pueden organizar su ropa juntos, asi aprenden a lavarla, secarla y guardarla de manera correcta. 

  • Agradecer por lo bueno y aprender de lo malo. Todo esto juntos para que ellos miren que las emociones tienen consecuencias. Explicarles y enseñarles que los errores son una parte fundamental de su crecimiento.
  • Escucharles, sin importar lo que esté haciendo en ese momento. Así ellos sabrán que son importantes para usted y que la palabra de ellos es importante. 

Por ejemplo: Cuando mis nietos me hablan yo paro lo que estoy haciendo, me agacho o me siento en el piso para que mis ojos estén al nivel de ellos, les escucho activamente moviendo la cabeza o hago otros gestos, repito un poco de lo que dicen y; al final de la conversación, afirmo lo que dicen o extiendo sobre lo que están aprendiendo.

  • Tratar a nuestros hijos como si fueran amigos. Prestarles la atención adecuada y a tiempo; mirarles a los ojos cuando hablan, no juzgarles y no fomentar miedo.
  • Enseñarles a respetar los gustos y las opiniones de los demás; así como usted y quienes lo aman lo respetan a él o ella. Enseñarles sobre el respeto es una gran oportunidad para enfocarse en el desarrollo espiritual. Por ejemplo, la Regla de Oro de la Biblia es excelente para aprender este concepto: 

“Así que en todo, traten ustedes a los demás como quieren que ellos les traten a ustedes, porque en esto se resume la ley y los profetas.”

Mateo 7:12

  • Si sus niños están teniendo un momento difícil acompañado de berrinches, lloros y gritos; espere que pase un tiempo prudente, déjelos llorar o gritar, siempre y cuando estén fuera de peligro. Luego, acompáñelos en sus emociones, cuénteles que sabe lo que están sintiendo, pero que pronto pasará. Abrázelos y arrúllelos, hasta que logren tranquilizarse.

¡Recuerde! No hay niños mal criados, hay niños en proceso de desarrollo y todas sus emociones son moldeables con amor y dedicación y principios bíblicos.

¡Y ahora! Levántese, corra a ver a su niño; abrácelo, béselo, dígale cuánto lo ama y cuán importante es él para usted.

A mis nietos les digo todo el tiempo que los amo mucho y luego les pregunto, “¿pero sabes quién te ama más? ¡Dios!” Ahora se sabe la respuesta de memoria, cuando le pregunto siempre me responde, “¡Mimi por qué me sigues preguntando, yo sé la respuesta, Dios me ama más!”

Educar niños llenos de amor, hará la diferencia. Necesitamos que el amor sea lo que rige, porque a partir de él podemos construir la empatía, la alegría, el agradecimiento, el perdón y la solidaridad.

Es mejor criar niños llenos de amor que con el tiempo conocerán el mundo a su alrededor; a criar niños con falta de cariño, llenos de miedos que con el tiempo crecerán ser defensivos. 

Si le gustó esta información, le recomiendo leer sobre las 5 necesidades emocionales de los niños en edad preescolar y formas de apoyarlos.

Fuentes: